Singles en Madeira

Día 1: Origen - Funchal

Nuestras deseadas vacaciones están a punto de comenzar. Los viajeros tendrán que hacer las maletas y dirigirse al aeropuerto con antelación. Luego solo quedará disfrutar del vuelo hasta la hora de llegada, donde una vez hayamos aterrizado nos estarán esperando para llevarnos al hotel.

Día 2: Conocer Funchal

Tras el desayuno, podemos empezar por conocer la bonita ciudad de Funchal. En Madeira residen alrededor de 260.000 personas, de las cuales 120.000 viven en Funchal, su capital.

Funchal se refugia al pie del mar y las montañas y las ventanas de sus casas miran al mar para prevenir los saqueos de antiguos piratas. Esta capital ha sabido guardar su esencia durante años.
Te aconsejamos que dediques al menos un día a esta bonita ciudad. Callejuelas laberínticas, calzadas de adoquines, puertas decoradas por iniciativa de artistas locales, casitas bajas a lo largo de toda la ladera, un casco histórico que seduce y un ambientazo nocturno extraordinario.

Hacemos una parada para reponer fuerzas en uno de los muchos restaurantes del caso antiguo a disfrutar del plato típico de Madeira, la Caldereta de pescado, acompañado por un rico vino verde fresquito.

Día 3: Teleférico, jardines y cestos de mimbres

Tras el desayuno os aconsejamos una de las experiencias imprescindibles que hacer en Funchal.; Subir en teleférico a la población de Monte obteniendo la mejor panorámica de la ciudad. Además podrás complementar la visita con los Monte Palace Tropical Garden, del que dicen ser uno de los jardines botánicos más bellos del mundo según la Condé Nast Traveller, y acabar la mañana descendiendo a toda velocidad con los famosos cestos de mimbre.
Para la noche aconsejamos disfrutar de una cena en algún restaurante con terraza y música.

Día 4: Ascender por encima de los picos de la Isla

Tras el desayuno, nuestro consejo del día, alquilar un coche y emprender la marcha hacia el interior de la isla y ascender desde el nivel del mar hasta el Pico de Arieiro de 1800 metros, casi nada, aquí podréis contemplar un paisaje mas arriba que las nubes.

Podéis comer por los alrededores, y luego sentir vértigo en los más espectaculares miradores de Europa, Madeira no es una isla que destaque por las playas, sino por su singular orografía. Dentro de ella está la mano del hombre que ha sabido crear algunos de los "balcones" más impresionantes de toda Europa. Hablamos particularmente del de Eira do Serrado, uno de los lugares más bonitos de Madeira con impresionantes vistas a Curral das Freiras (el Valle de las Monjas)...

Día 5: Día de Piscinas naturales

Hoy nos tomamos un relax en las múltiples piscinas naturales de Madeira. Desayunamos, cogemos el bañador, toalla y las chanclas y para el agua. Tomamos rumbo a Porto Moniz, podéis disfrutar todo el día del agua del mar Atlántico, pues este complejo cuenta con sombrillas, tumbonas, restaurantes, salvavidas, áreas infantiles, bares, puestos de socorro, vestuarios, aparcamientos e instalaciones para discapacitados.

¿A que os ha gustado? Para la cena os proponemos una espetada típica de la Isla.

Día 6: Grutas Sao Vicente

Después del desayuno, te proponemos una excursión que aunque seas o no apasionado al vulcanismo, te sorprenderá. Estamos en el punto donde comenzó a formarse esta isla de origen volcánico y por cuyas grutas en forma de tubos de lava puedes acceder más de 1000 metros.

Y como tendrás que reponer fuerzas, te recomendamos una buena espetada, especie de brocheta de corte de carne de vaca, condimentado con ajo y laurel.

Día 7: Visita por los pueblos marineros

Desayuno y aconsejamos hacer una ruta por los pueblos encantadores de pescadores anclados en el pasado. Y no uno ni dos, sino que será en los pueblos pesqueros de Caniçal, Machico o Cámara de Lobos, por ejemplo, donde podrás disfrutar de la tradición histórica y arquitectónica más antiguas, con edificaciones que datan del 1450, incluyendo algunos de los faros más antiguos de la isla. Si vais por la mañana, podrás presenciar el trajín de los pescadores que faenan en busca del producto fresco del día mientras que las tardes son más propicias para ver las costumbres que mantienen los más viejos del lugar.

Por la tarde, os podemos ofrecer visitar las casas tradicionales de Santana, son unas edificaciones que conservan las construcciones más primitivas de la isla, de forma triangular y cubiertas de paja. !Visita imprescindible!

Día 8: Regreso a casa

Tras el desayuno, hacemos tiempo hasta que vengan a buscarnos para ir al aeropuerto de Funchal, volvemos a casa.

Fin de servicios

done Gastronomía de Madeira

Maderia, una isla que encierra ricos manjares y platos que han ido evolucionando a lo largo del tiempo. No podrás resistirte a probar las lapas a la parrilla, parecido a las almejas pero más duras y más grandes o el Bolo do Caco el tradicional pan hecho con patata y untado con mantequilla de ajo y por supuesto no te irás sin probar La Espetada, posiblemente el plato típico tradicional más famoso. Se trata de cortes de la carne de vaca condimentados con ajo y laurel y presentados en forma de brocheta tras pasarse a la parrilla

done Piscinas naturales en Porto Moniz.

Las Piscinas Naturales de Porto Moniz son piscinas formadas por lava volcánica, donde el mar entra de forma natural trayendo agua cristalina. Además de sus excelentes condiciones para el baño, destacan por su belleza, estas piscinas naturales son el lugar ideal para relajarse, nadar, tomar el sol o solamente para dar un paseo

done Grutas Sao Vicente

Visitar estas grutas será como realizar un viaje el mismo centro de la tierra. Las Grutas de Sao Vicente, es uno de los lugares de visita obligatoria en Madeira. Formadas hace 890 000 años, son una de las primeras cuevas de origen volcánico abiertas al público en Portugal.
Las Cuevas de São Vicente se formaron a partir de una erupción volcánica que se produjo en Paul da Serra. El exterior, expuesto a temperaturas muy bajas, se solidificó rápidamente, mientras que el interior siguió conteniendo muchos gases que formaron una serie de tubos de lava.